El regreso a clases para los niños crea un hábito y un horario que si somos rigurosos pueden generar grandes beneficios en la salud oral, ya que en pandemia muchos de los pacientes aumentaron su nivel de sarro y de caries, puesto que perdieron muchas de sus rutinas, dentro de ellas, las de higiene oral.

En primer lugar, debemos saber que todo niñ@ menor de 8 años debe ser supervisado por un adulto para realizar la higiene bucal y tener claro los elementos que podemos utilizar en casa como el cepillo dental, idealmente de cerdas suaves y de un tamaño adecuado para la boca del paciente, pasta con una cantidad de flúor mayor a 1100 ppm, además del uso de seda dental, al menos en uno de los 3 cepillados diarios recomendados.

¿Qué pasa si mi hij@ almuerza en el colegio?

 Para los niñ@s que almuerzan en los establecimientos educacionales es importante tener un cepillo y pasta diferente al de la casa, siempre en estuche cerrado para evitar contacto con otros objetos de la mochila, el recordatorio en casa de realizar el cepillado es fundamental, así como también enviar colaciones saludables, ya que la alimentación es fundamental para la prevención de las caries.

Mi hijo está en etapa adolescente

 Es de suma importancia evitar malos hábitos como el consumo de alcohol, tabaco y drogas que generan enfermedades bucales como la periodontitis, además de recordar y reforzar el cepillado dental, evitar piercing en lengua y labios, ya que pueden traer consecuencias en los tejidos blandos como las encías.

¡Importancia de visitar al odontólogo!

 Todo lo mencionado anteriormente debe ir acompañado con la visita al Odontólogo, idealmente cada 6 meses, si los pacientes han presentado caries activas en el último tiempo, a no ser que el odontólogo tratante indique que necesita control en otra fecha. Es de suma importancia la prevención en salud oral, es por eso por lo que como odontólogos recomendamos limpieza (destartraje y profilaxis) sellantes para que la higiene sea más fácil y disminuya acumulación de alimentos, fluoración para reforzar la capa externa de los dientes y toma de radiografías, así como también asesoramiento en técnica de cepillado. Cabe destacar que estos son métodos NO invasivos y preventivos que siempre será mejor aceptado por el paciente que un tratamiento invasivo cuando ya tenemos infecciones o enfermedades bucales.