La mala posición de los dientes (dientes chuecos) no sólo es un problema estético, además hace más difícil limpiarlos adecuadamente lo que puede derivar en caries, enfermedades de las encías y hasta pérdida de una pieza dental, además de problemas articulares como dolor a la masticación.
De ahí la importancia de la Ortodoncia, especialidad de la odontología que previene y trata los problemas de posición y deformaciones que afectan a las estructuras dentomaxilofaciales.
La ortodoncia es la rama de la odontología que se encarga del estudio, prevención, diagnóstico y tratamiento de la desarmonía de los dientes, la mordida y la posición de los maxilares. Una incorrecta alineación dental predispone a secuelas prejudiciales como dificultades para mantener una correcta higiene oral, riesgo de generar caries y enfermedad periodontal, anomalías funcionales, problemas en la articulación temporomandibular y otros problemas psicosociales.
TIPOS DE APARATOS
Los tratamientos ortodónticos se pueden llevar a cabo con aparatos fijos o removibles:
- Aparatos removibles: se pueden extraer en cualquier momento, cubren y envuelven la mayor parte de los dientes. En el caso de llevar aparatos removibles, la higiene bucal diaria es igual a la de una persona sin aparatos, sólo debe realizar una higiene adicional para combatir el cúmulo de biofilm dental.
Aparatos fijos: los frenillos o brackets van adheridos a la superficie dental mediante resinas y tensados entre ellos con un arco metálico. En los aparatos fijos, la fuerza aplicada por los arcos mueve los dientes con mucha precisión a la posición requerida.
- Brackets metálicos: son los más comúnmente utilizados.
- Brackets cerámicos: son estéticos.